Querido Dios,
Mientras miramos con expectativa lo que nos espera el futuro a todos y cada uno de nosotros… ayúdanos a discernir tu voz. Ayúdanos a nunca ser egoístas y a compartir libremente con otros el conocimiento de Tu Verdad. Sé que nos miras con ojos de amor, pero por dentro sientes dolor cuando otros sufren. Ayúdanos a verte como un Ayudante en lugar de alguien a quien realmente no le importa nada. Te importa. Incluso cuando a veces es posible que no sepamos al 100% lo que estás haciendo, sí te importa. Te preocupas lo suficiente como para saber cuántos cabellos de nuestra cabeza están contados y te preocupas lo suficiente como para guiarnos por el camino correcto. Dios, ayúdanos a buscarte con corazones abiertos, esperando un toque espiritual de tu presencia en nosotros y alrededor de nosotros. Ayúdanos a nunca avergonzarnos de tener encuentros contigo. Ayúdanos a nunca dejarte ir. Para continuar siempre tan fuerte y firme en tu verdad inquebrantable que ha estado aquí por generaciones y generaciones. Qué privilegio poder abrir una Biblia y pasar tiempo contigo. Ayúdanos a pasar tanto tiempo contigo que cada mañana al despertar solo estemos pensando en pasar tanto tiempo contigo. Mientras hacemos nuestros deberes diarios también. Nos das tranquilidad. Nada como este mundo puede dar. Quitas los ídolos de nuestras vidas para que puedas ser nuestro todo. Protégenos de los ídolos y protégenos de no ponerte primero.
En el nombre de Jesús, Amén.
Atentamente,
Un miembro de la familia de la fe